Fábula del Juez y el Verdugo
Hoy se ha eliminado la firma de Augusto Pinochet de la Constitución chilena, algo impensable diez años atrás.
Dedico una reverencia al juez Garzón que comenzó el proceso contra Pinochet y su dictadura de forma retroactiva (es decir, contradiciendo un principio fundamental del Derecho).
Viejo y achacoso, juzgado como cualquier criminal y, ahora, eliminado del Senado y de la Constitución de su país, Pinochet podría quejarse con razón de una sola cosa: Dicho proceso que un juez español inició contra un dictador chileno es un proceso que los españoles nunca hicimos en nuestro país y que ningún juez chileno hará nunca contra los representantes vivos de la dictadura española.
Dedico una reverencia al juez Garzón que comenzó el proceso contra Pinochet y su dictadura de forma retroactiva (es decir, contradiciendo un principio fundamental del Derecho).
Viejo y achacoso, juzgado como cualquier criminal y, ahora, eliminado del Senado y de la Constitución de su país, Pinochet podría quejarse con razón de una sola cosa: Dicho proceso que un juez español inició contra un dictador chileno es un proceso que los españoles nunca hicimos en nuestro país y que ningún juez chileno hará nunca contra los representantes vivos de la dictadura española.
5 comentarios
ella -
Ahora soy yo quien está en Córdoba, y aprovecho cinco minutos que tengo para visitarte.
Lamentablemente, aquí no sólo no se castiga a los que perduran (aunque consigamos haberles "b"otado) sino que se les aclama, se les da palmaditas en la espalda!
Eso mismo que me parece lamentable que suceda en EUA sucede aquí, y sin embargo en esta tierra pobre y muerta de espíritu no me suena tan patético...
AY! la paja ajena... pero dónde las estacas?
Pistachile -
Gregoriok, no he tenido la suerte de pasear por el desierto de Atacama... beato te!!
Horacio, yo solía hablar de Pinochet con un par de amigos, antes de lo del juicio, no veas que alegría el día que lo enjuiciaron por primera vez.
Poli, la verdad es que España también sigue dividida... es diferente pero parecido... de todos modos me rindo a tus pies por ser de ese bellísimo país.
El otro día en el tren por primera vez estuve dos horas seguidas hablando con una chilena. Me doblaba la edad, pero la verdad es que me había cierto feeling. Me dijo: Los chilenos estamos ahí... casi cayéndonos al mar.
poli -
falta poco señores, para verlo caer y para verlo morir.
una mosdidita, pistacho.
Horacio -
gregoriok -